Propuesta educativa
Principios educativos
El niño/a
Primer plano
En el primer plano, el niño/a posee lo que la Dra. Montessori llamó "mente absorbente" ya que se asemeja a una esponja que absorbe, asimila e interioriza toda la información que encuentra disponible a su alrededor mediante los sentidos, sea positiva o negativa.
Además, los niños/as atraviesan periodos sensibles. Estos son momentos, ventanas de oportunidades que les permiten adquirir aprendizajes, sin esfuerzo, necesarios para adaptarse al ambiente que los rodea.
El adulto guía
El adulto debe adquirir diversas herramientas para relacionarse de manera respetuosa, empática, humilde y sensible, con amabilidad, amor, equidad y firmeza, sin recurrir a premios ni castigos.
Para lograr respetar los ritmos y adaptarse a las necesidades del desarrollo evolutivo de cada niño/a es necesario conocer al niño/a, los periodos sensibles y evolutivos, así como practicar una observación atenta para responder a sus necesidades en el momento indicado.
Ambiente preparado
Le llamamos ambiente preparado a espacios de trabajo que son creados, diseñados y organizados en base a las necesidades evolutivas de cada etapa del desarrollo. Cada ambiente se adapta a las medidas adecuadas para los niños/as: estanterías, mesas, sillas, baños, cocina, etc. Se generan espacios cálidos, ordenados y bellos para promover la concentración, la calma y el trabajo.
En D'amore, todos los ambientes cuentan con mobiliario y materiales Montessori auténticos.
Los materiales multisensoriales son unos de los elementos claves de la Educación Montessori. Estos fueron diseñados específicamente para trabajar conceptos abstractos a través de la experiencia sensorial concreta; de esta manera se aprende mediante los sentidos, con sus propias manos.
Aulas multigrado
En las investigaciones realizadas por la Dra. Montessori pudo observar lo beneficioso que resultaban para los niños/as el trabajo con pares de otras edades, ya que parte del aprendizaje se realiza a partir de la colaboración y observación del trabajo de otros.
Los niños y las niñas conviven dentro del ambiente en una pequeña comunidad con pares más grandes y más pequeños; esto fomenta la tolerancia, el respeto, el gusto por ayudar y ser ayudado, la solidaridad y compañerismo.
Educación para la vida
La educación Montessori fomenta la independencia y la autonomía. Eso significa que va más allá de lo académico, prepara a los niños/as para la vida. Esto incluye el cuidado de sí mismos, del ambiente y de los demás; así como habilidades y competencias fundamentales para la vida en el siglo XXI: respeto, tolerancia, colaboración y cooperación, creatividad, resolución de problemas, pensamiento crítico, iniciativa, autodisciplina, entre otras.
La toma de decisiones es un aspecto fundamental de trabajo de los niños/as en los ambientes Montessori. Al ser participantes activos y tomar decisiones, los niños/as aprenden a utilizar su voluntad, seguir sus intereses y desarrollar sus propias estrategias para resolver problemas e implementar soluciones.
Educación para la paz
El respeto, la solidaridad, la empatía, la tolerancia, la colaboración, el compañerismo y la resolución de conflictos de forma dialogada y pacifica guían nuestro accionar cotidiano y es través del ejemplo que practicamos la educación para la paz.
Se alienta a la reflexión e identificación de sentimientos y emociones que surgen en las diferentes situaciones cotidianas. Se ayuda a poner en palabras lo sentido, trabajando la resolución de problemas desde la escucha activa y el diálogo respetuoso.
“Todo el mundo habla de paz, pero nadie educa para la paz. La gente educa para competir y este es el principio de cualquier guerra. Cuando eduquemos para cooperar y ser solidarios unos con otros, ese día estaremos educando para la paz” María Montessori
Aprendizaje por descubrimiento
En D'amore, entendemos el aprendizaje desde la construcción activa por parte del alumno/a. El niño/a parte de sus intereses para resolver un problema o interrogante.
En este proceso de descubrimiento, los nuevos conocimientos tienen un rol funcional y operante, son significativos para el alumno/a y por lo tanto, lo llevan a resignificar sus ideas previas y construir nuevas relaciones. Es decir, el alumno/a se apropia de ellos y pueda aplicarlos en otros contextos y situaciones.
De la misma manera, se realizan sucesivas aproximaciones al conocimiento, desde diferentes contextos o con diferentes materiales, como un espiral en el que se revisan conceptos anteriores y se construyen nuevos. Se propician instancias y se le da libertad para que pueda acercarse a esos conceptos de forma recursiva.
El aprendizaje por descubrimiento, vivencial con materiales multisensoriales manipulativos es fundamental en la educación Montessori. En este contacto con el mundo real y la naturaleza, logran descubrir conocimientos nuevos, manipular objetos que les permiten mayor independencia y autonomía, experimentar para resolver interrogantes o situaciones problema.
Libertad con límites
Los niños/as tiene libertad de explorar, hacer y aprender por sí mismos en el ambiente preparado. Esta libertad se realiza dentro de 3 límites claro, de los que derivan todos los demás, y ayudan a cuidar la integridad física y emocional, la concentración y el trabajo de todos/as: respeto por uno mismo, respeto por los demás, respeto por el ambiente.
Estos límites se reflejan en el trabajo diario de forma práctica: usar un tono de voz bajo, guardar el material luego de utilizarlo, mantener el ambiente limpio y ordenado, quitarse el calzado del exterior y usar el del ambiente, entre otros.
Libertad de elección
Los niños/as tienen libertad de elegir con qué materiales trabajar, dentro de los materiales ya presentados por la guía o un compañero que domine el material. Esto resulta en que pocas veces se ve a todos los niños haciendo lo mismo a la misma vez.
Algunos alumnos/as pueden tener dificultad para tomar sus propias decisiones. En estos casos la guía los ayuda proponiendo opciones limitadas paulatinamente, hasta que logren elegir por sí mismos actividades significativas y desafiantes.
Libertad de repetición
Los niños/as pueden trabajar con el mismo material el tiempo que deseen, repitiendo una y otra vez su trabajo con un material determinado.
Si otro niño/a desea utilizar el material, debe esperar a que el otro niño/a termine: eligiendo otro material, observando en silencio el trabajo de su compañero/a, o uniéndose al trabajo, solo si el primer niño/ así lo desea.
Libertad de comunicación
Se alienta la comunicación entre los niños/as y con los adultos guía.
Se aprenden habilidades sociales para charlar y argumentar sobre las diferentes actividades, propuestas, materiales, intereses, a resolver problemas con respecto y escucha activa.
Libertad para equivocarse
Los materiales en el ambiente están diseñados para que los niños/ descubran por sí mismos el resultado y trabajen en el aprendizaje de diferentes habilidades o conocimientos.
Los materiales incluyen control de error visual, es decir, los niños pueden darse cuenta si se equivocaron. Esto les permite evaluar su propio trabajo, revisarlo, comprender qué aspecto debe ser modificado, elegir los pasos a seguir, y completarlo. Todo esto se realiza sin intervención del adulto.